
Como ya apareció en este mismo blog, la Hermandad de Palomares afrontó el coste del estudio patológico del terreno colindante al Santuario para conocer las causas de las grietas que han ido apareciendo de un tiempo a esta parte en el muro del Evangelio del templo.
Dicho estudio reveló que la aparición de las mismas se debe a un fallo en la cimentación provocado por un cambio de las propiedades del terreno, debido quizás a la colocación de las dos hileras de árboles que adornaban la plaza colindante.
Una vez presentado este informe a los técnicos pertinentes, se estimó como mejor solución la inyección de resinas expansivas, tratamiento novedoso que se está utilizando cada vez más en problemas de cimentación y en edificios de similares características.
Una vez elegida la empresa encargada de la intervención, en la mañana de hoy han comenzado las tareas consistente en hacer una tomografía del terreno previo a la inyección de la espuma previsto para mañana.