
Poco antes de las siete de la mañana estallaban los primeros cohetes convocando a los fieles, cuya asistencia fue igual que en años anteriores. Los jóvenes cofrades participaron portando la cruz parroquial y los faroles. Sobre las 9 menos cuarto quedaba situado el Simpecado en el altar mayor de la parroquia, donde comenzaba la misa del alba con bastante asistencia de fieles.
El próximo año (D.M.) se cumplirá la XX edición de este rosario, instaurado en 1994 con motivo del 550 Aniversario de la Aparición.