
A partir de 1950, cuando se fundó el Monasterio de Ntra. Sra.de Palomares, Sor Mercedes de la Eucaristía, Madre Abadesa, pintó las paredes y cúpulas con escenas alusivas a la vida de la Virgen. En la pared trasera, una vez cegada la ventana,pintó una colosal Asunción. Las otras paredes acogían la Anunciación, y a San Joaquín, Santa Ana y la Virgen Niña. Junto al arco pintó una representación idealizada de la Aparición de la Virgen, y en la cúpula, la Paloma del Espíritu Santo, iconografía de la Ermita. El zócalo también estado pintado imitando mármol.